Bisulfito
El ion bisulfito (nomenclatura recomendada por IUPAC: sulfito ácido) es el ion HSO3-. Las sales que contienen el ion HSO3- se denominan bisulfitos también conocidos como lejías de sulfito. Por ejemplo, el bisulfito de sodio es NaHSO3.
Estructura
[editar]Alguna evidencia puede sugerir que el protón en el ion bisulfito se encuentra en azufre, dando lugar a la simetría de C3v. Hay, sin embargo, alguna evidencia de espectroscopia 17O RMN que sugiere dos formas tautoméricas HSO3- que existen en equilibrio dinámico, uno que tiene el protón unido a azufre (HSO3-) y uno que está protonado el oxígeno (HOSO2-).[1] La estructura C3v está soportada por cristalografía de rayos X y, en solución acuosa, por espectroscopía Raman (ν (S – H) = 2500 cm−1).
Reacciones
[editar]Las sales de bisulfito se preparan típicamente por tratamiento de soluciones alcalinas con exceso de dióxido de azufre
- SO2 + NaOH → NaHSO3
HSO3- es la base conjugada del ácido sulfuroso, H2SO3:
- H2SO3 ⇌ HSO3− + H+
El ácido sulfuroso no es un compuesto aislable y tampoco parece existir en solución. Se da un equilibrio que es mucho más consistente con la evidencia espectroscópica. :
- SO2 + H2O ⇌ HSO3− + H+
HSO3- es una especie ácida débil con una pKa de 6.97. Su base conjugada es el ion sulfito, SO32−:
- HSO3− ⇌ SO32− + H+
Los bisulfitos son agentes reductores, como lo son todos los sulfitos y el dióxido de azufre, que contiene azufre en el mismo estado de oxidación (+4).
Medicina
[editar]Las sales de bisulfito son aditivos comunes a la epinefrina del fármaco para evitar su oxidación a adrenocromo y la inactivación resultante. Los bisulfitos a veces pueden causar una reacción alérgica. Esto es diferente de la alergia común a las sulfamidas. Fraser y Huang han determinado la cantidad de bisulfito en los bloqueadores médicos del dolor que inicia la hipersensibilidad de tipo 1.[2]
Véase también
[editar]Referencias
[editar]- ↑ Horner, D. A.; Connick, R. E. (1986). «Equilibrium quotient for the isomerization of bisulfite ion from HSO3− to SO3H−». Inorganic Chemistry 25 (14): 2414-2417. doi:10.1021/ic00234a026.
- ↑ Fraser, W. A.; Huang, A. S. (1984). «Are sulfites additives really safe?». New England Journal of Medicine 311 (8): 542. doi:10.1056/NEJM198408233110824.